SARA: el programa sudamericano que valida la unión entre ganadería regenerativa y mercados de carbono

SARA: el programa sudamericano que valida la unión entre ganadería regenerativa y mercados de carbono

En el mapa de iniciativas de ganadería regenerativa en Sudamérica, SARA (South American Regenerative
Agriculture) se ha convertido en un caso paradigmático: un programa que busca transformar prácticas
ganaderas, medir resultados de captura de carbono y articular un mercado de créditos basado en regeneración. En 2025, SARA obtuvo la validación de Verra, la certicadora internacional de créditos de carbono, un hito que le da mayor credibilidad comercial y técnica.


SARA propone un esquema donde los productores reciben incentivos económicos por prácticas verificables: manejo de pastos, rotaciones, restauración de suelos y mejoras en la biodiversidad. Los resultados se monitorean con métricas basadas en sensores, modelado y auditorías; a partir de eso se generan créditos que compran empresas en busca de compensar huella de carbono. Plataformas y consultoras como Anthesis han acompañado la estructuración de proyectos y la denición de metodologías.

Hoy la iniciativa ya agrupa más de 130 campos y alrededor de 150.000 hectáreas según reportes de
actores locales, lo que la convierte en una de las mayores experiencias de escalamiento en la región. Para
productores, SARA no solo signica acceso a nuevos ingresos (bonos por resultados), sino también acompañamiento técnico para mejorar productividad y resiliencia.


No obstante, SARA no está libre de críticas. ONG y movimientos campesinos advierten sobre riesgos: que
la monetización del carbono termine priorizando parcelas que “rinden” créditos sobre comunidades que
practican otras formas de conservación; que la narrativa corporativa de “compra de soluciones” desplace
compromisos más estructurales con reducción de emisiones en origen; o que los pequeños productores
queden fuera por falta de capacidad técnica. Estas tensiones plantean preguntas sobre equidad y gobernanza.


La validación por Verra aporta conanza técnica, pero también obliga a que el programa mantenga transparencia en metodologías y benecios. Las lecciones tempranas de SARA son claras: la ciencia y el mercado pueden impulsar cambios reales si hay protocolos rigurosos y mecanismos de reparto justo de ingresos. Asimismo, el acompañamiento técnico (extensionismo regenerativo) es clave para que la adopción no sea superficial.

En el plano regional, SARA puede funcionar como modelo replicable si se respetan contextos locales: lo
que funciona en la Pampa argentina puede no ser igual en los llanos colombianos o en la Patagonia chilena. La gobernanza, la participación comunitaria y el diseño de contratos de carbono inclusivos serán
determinantes.


En conclusión, SARA revela una tensión productiva: combinar mercado, ciencia y tradición para que la
ganadería deje de ser parte del problema y se convierta en instrumento de restauración. Si se administra
con integridad, puede entregar ganancias para el productor y servicios para la naturaleza. Si falla la
gobernanza, el riesgo es convertir la regeneración en un producto nanciero desconectado de la tierra.
Fuentes

  • La certicadora internacional Verra le dio luz verde al programa sudamericano SARA, con el que la
    ganadería regenerativa local aspira a cobrar bonos de carbono (Bichos de Campo)
  • ¡Validamos nuestro programa de carbono SARA en VERRA! (ovis21.com)
  • SARA: cómo es el programa que busca escalar la ganadería regenerativa en Sudamérica (Río
    Negro)
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Escrito por:
AOA Chile
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